Como otro mes cualquiera, subí a Facebook mi intervención en el pleno mensual del Ayuntamiento. En ese punto del orden del día se nos propuso por parte de Més Algemesí (Compromís), con el voto de Izquierda Unida, aprobar una moción de apoyo a alcaldes catalanes imputados por desafiar la ley y la Constitución. Evidentemente, no lo podíamos permitir y por eso presentamos una enmienda; para que nuestro ayuntamiento, un ayuntamiento democrático, apoyase a quienes sufren coacciones y no a quienes coaccionan y señalan a los que no piensan como ellos. Como no podía ser de otro modo, nuestra propuesta, la del seny i el trellat, salió adelante.
Lo que nadie iba a imaginar es que tras colgar el vídeo me levantase al día siguiente y, entre todos, hicieseis viral mi intervención. ¡Os habéis pasado! Por WhatsApp, YouTube, Facebook y Twitter; alucinante, no tengo palabras.
Tengo que reconocer que eso de que tu cara vaya circulando por España al principio asusta un poco. Ya sabéis, esto de las redes es un monstruo y se descontrola en un plis plas. Pero ahora, después de todo lo que ha pasado, solo puedo daros las gracias a todos y a cada uno de vosotros. Porque entre todos me habéis enriquecido, muchos me habéis emocionado y lo más bonito de todo, en estos tiempos tan difíciles para los políticos donde unos pocos sinvergüenzas (también de mi partido) nos han hecho mucho daño, me habéis transmitido que se puede seguir confiando en los políticos vocacionales, que somos muchos.
Desde Ávila, Granada, Madrid, Sevilla, Bilbao, Cuenca, Ourense, Tenerife, Palma de Mallorca y multitud de rincones de España y de toda la Comunidad Valenciana, mi tierra. Desde París y las Islas Mauricio. Y por supuesto Algemesí. Gracias por ese centenar de mensajes privados de apoyo y de ánimo. Gracias de corazón por tomaros la molestia de buscarme para escribirme. Mis respetos hacia vosotros por esforzaros en entender mi otra querida lengua, el valenciano. Agradezco que os hayáis identificado con el mensaje. Eso significa que sois muchos los que formáis parte de esa mayoría silenciosa, una mayoría que por fin ha hablado y les ha dicho a sus hermanos catalanes que no están solos. Catalanes que por fin pueden sacar sus banderas, la rojigualda y la senyera, juntas, sin miedo a que le llamen fachas. Qué triste, ¿verdad? Eso se acabó.
Entre todos los mensajes, permitidme que me quede con los de los amigos catalanes: gracias por sinceraros conmigo, por contarme los problemas que os han causado en las familias, las amistades que se han roto o el miedo a expresar lo que sentís por culpa de cuatro políticos irresponsables. No teníais porqué, al fin y al cabo soy un desconocido para vosotros, y lo habéis hecho. Muchos mantendremos el contacto. No sabéis lo que me habéis emocionado.
Por ese millón doscientas mil reproducciones, por los cientos de comentarios de apoyo y agradecimiento y los más de veinticinco mil compartidos en Facebook. Imposible responderos a todos.
Poca cosa más que decir. Después de este chute de energía positiva y ahora que todo está un poco más calmado, este humilde concejal de 24 años vuelve a su día a día, para trabajar por los problemas de mis vecinos junto al gran equipo del que tengo el honor de formar parte. Mi lema: servir y no servirse. Abrazos para todos.
Eskerrik. Grazas. Gracias. Gràcies.
Jose Javier Sanchis
Concejal del Grupo Popular del Ayuntamiento de Algemesí