Termina un sueño, pero por qué no… empieza otro. Otro sueño que tiene que ser igual de ambicioso, que tiene que tener como meta volver a estar entre los mejores de la categoría, todo un lujo y toda una responsabilidad.
Nunca hemos dicho que haya sido fácil o que lo vaya a ser en un futuro, hacen falta muchas horas de trabajo del equipo técnico (y tenemos que reconocer el trabajo de Mori y de Edu en este punto), patrocinadores que apuesten por este deporte, una directiva que intente avanzar siempre, mucho esfuerzo y dedicación por parte de jugadores y que cada quince días el 9 d’octubre este lleno hasta arriba de socios, padres, madres, aficionados, chicos y chicas de la base… sólo uniendo estos factores clave podremos vivir momentos mágicos como el vivido al final del partido del domingo todos juntos en la grada con los brazos arriba o tantos otros vividos este fin de semana donde la ciudad de Algemesí ha vuelto a respirar BALONMANO, en mayúsculas, me vais a permitir que escriba de esta forma el nombre de este deporte que cada día que pasa, cada sector, cada entrenamiento en Maristas o cada evento del club va enganchando a más gente y del cuál “algunos locos” hemos hecho un forma de vida.
La primera jornada del viernes nos dejó momentos de nerviosismo donde nuestros jugadores no terminaban de estar cómodos ni de encontrar su juego. Safa de Madrid con un par de jugadores muy desequilibrantes en el lanzamiento exterior tampoco encontraba la forma de llevarse el partido a su terreno y buena culpa de ello la tenia nuestra defensa y un Salva Sales espectacular en portería. En ataque Ximo Martínez nos mantenía vivos en el partido, beneficiándose en muchas ocasiones de las fijaciones y la continuidad en el lado izquierdo de nuestro ataque, donde Padi estaba muy vigilado. Final de infarto, a falta de pocos segundos el equipo un gol abajo, empate in extremis y Safa que ya no pudo lanzar faltando un par de segundos. En el otro partido Adrianenc, el triunfador del sector y equipo que jugará la próxima temporada en Plata, venció a Anaitasuna por un marcador de 26-23. El equipo navarro plagado de jóvenes promesas fue a remolque todo el partido en el marcador pero consiguió poner contra las cuerdas a los catalanes en la segunda parte ajustando mucho mejor su defensa. Mucha calidad en algunos de sus jugadores, tres de ellos alternando esta temporada el segundo equipo con el de ASOBAL.
El sábado llegó la primera derrota en casa de nuestro equipo precisamente contra los jugadores del Anaitasuna. Cuando mejor pintaba la cosa con un marcador de 24-21 a falta de 4 minutos, el equipo navarro abrió la defensa y encadenó muy buenas acciones en ataque que dinamitaron el partido. Parcial de 0-5 que fue demoledor para los nuestros. Salva volvió a estar a un nivel altísimo en portería, nuestra defensa también… pero, nos faltó machacar en el momento clave y lo acabamos pagando. Los jugadores se vaciaron en el campo y poco más se puede pedir. En el segundo partido Sant Martí Adrianenc, se impuso a Safa con mucho oficio. Apretando desde el principio y con un extremo derecho que finalizaba todo lo que le llegaba. El equipo catalán venía como uno de los favoritos y no defraudó. Victoria clara al final del Adrianenc que le convertía ya en primer clasificado matemáticamente del sector ya que tenían ganado el golaveraje con los navarros.
En la última jornada, intrascendente, donde Anaitasuna se impuso a Safa en el duelo de las 10 de la mañana el pabellón volvió a presentar una gran entrada sobretodo de cara al segundo partido. Los navarros con 4 puntos son los segundos clasificados del sector, y después de este primer duelo nuestros chicos demostraron que querían la victoria y despedirse así de la mejor manera posible de esta temporada. Primera parte igualadísima donde los dos equipos conseguían pequeñas rentas de 1 o 2 goles. En la segunda parte más de lo mismo y momentos donde las defensas y los dos porteros ganaban la batalla a los ataques de ambos equipos. Se llegó a los momentos finales con un gol de ventaja que gracias a una última acción donde Carlos Miquel penetró en la defensa rival y después del rebote que cazó Montrull desde el pivote se pudo empatar en el último instante de partido.
Momentos de gran BALONMANO el que hemos podido vivir este fin de semana en nuestro pabellón y una gran experiencia que seguro que nos hará crecer como equipo y como club. Ahora un merecido descanso para todos y a pensar ya en la próxima temporada donde seguro que volveremos a tener un proyecto ilusionante y opciones de estar entre los mejores equipos de la Primera Nacional.